Queridas familias:
A continuación podéis ver
cuatro propuestas para realizar en familia.
Un abrazo gigante,
Zulema e Irene.
PROPUESTA
DE LENGUAJE
La actividad que os
proponemos es un TRABALENGUAS. Les permiten a nuestros niños mejorar la
articulación de los fonemas, la fluidez verbal y aprender a rimar; también
favorece la adquisición de una buena rapidez del habla con precisión y sin
equivocarse.
El trabalenguas es el
siguiente:
La idea es leérselo al niño varias veces, que lo comprenda y
posteriormente que lo repita al principio con ayuda y posteriormente ellos
solos. Las primeras veces lo repetirá lentamente e irá adquiriendo mayor
rapidez en sus repeticiones. Sabemos que la R es un fonema complicado, por ello
no os preocupéis si el niño no lo pronuncia correctamente. En ocasiones, su
adecuada pronunciación no se consigue hasta los seis años.
Se puede ampliar la actividad, cambiando el nombre del
animal, modificando la parte del cuerpo,
el nombre del señor, también pueden escenificar cómo se mueve un perro,
realizar el ladrido del perro y todo aquello que se os ocurra.
Por último, os proponemos realizar un dibujo del
trabalenguas propuesto y que los niños copien la palabra PERRO en letra
mayúscula, escrita previamente por vosotros. Lo podemos ampliar escribiendo
cualquier otra palabra que les guste del trabalenguas, o bien, si el niño lo desea,
el trabalenguas completo.
PROPUESTA
DE LÓGICA-MATEMÁTICA:
“Búsqueda
de números”: consiste en esconder por la casa, sin que
los niños os vean, los números del 1 al 10, escritos en un papel/ post-it, o esconder números magnéticos si disponéis
(incluso bolitas del bingo). Podéis adaptarlo a cada niño (ampliando hasta el
20, por ejemplo).
Los niños podrán buscarlos,
reconocerlos, nombrarlos, ordenarlos…de forma autónoma o con vuestra ayuda.
Opcionalmente, podéis darles
un pequeño premio cuando consigan encontrar todos los números.
Además,
esos números los pueden guardar en un sobre para utilizarlos cuando cuenten una
serie de objetos.
EXPERIMENTACIÓN
RELAJACIÓN
MINDFULNESS
“Tranquilos
y atentos como una rana”
Podéis ponerlo en práctica
en casa con vuestros hijos para ayudarlos a relajarse, mejorar la atención, el
autoconocimiento, la autoconfianza y el aprendizaje.
Para
comenzar, nos sentamos cómodamente en una silla o en el suelo con un cojín, con
la espalda recta y relajada y los pies apoyados sobre el suelo. Con los ojos cerrados,
escuchamos el ejercicio de relajación guiado. Os dejamos dos propuestas: